El grupo IVI-RMA es resultante de la fusión que tuvo lugar en 2017, entre el Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) y su homólogo estadounidense Reproductive Medicine Associates of New Jersey (RMANJ).
Según parece, el grupo ha contratado a Morgan Stanley para una valoración oficial de la empresa, con el fin de buscar inversores, interesados en la adquisición de hasta el 30% de la compañía.
Un primer paso hacia la extensión externa
La información oficial ofrecida por el portavoz oficial de la compañía española, es que solo se quiere obtener una valoración y ver qué opciones estratégicas y económicas ofrece su situación actual.
Por descontado, podría no pasar absolutamente nada y que con la valoración extraída, se decida mantener el mismo ritmo de negocio que hasta ahora.
Pero lo cierto es que se busca principalmente encontrar inversores, que garanticen liquidez operativa, para mantener la continua expansión internacional que desde hace años ambas empresas están persiguiendo.
Más de 1.200 millones de valoración
Los primeros análisis apuntan a una valoración estimada que podría llegar a superar los 1.000 millones de euros e incluso alcanzar los 1.200 millones.
De ser así, para los inversores sería una oportunidad única y la más importante que se ha dado hasta la fecha en el sector, ya que nunca antes se había podido realizar una inversión de esta magnitud en empresas dedicadas a tratamientos de fertilidad.
Para el grupo también será beneficioso. IVI-RMA podría obtener hasta 14 veces el ebitda actual, con lo que su presencia ya en 11 países de todo el mundo, podría multiplicarse en un corto plazo muy rápidamente.
Los países en los que ya opera, por orden alfabético son Argentina, Brasil, Chile, Emiratos Árabes, España, Estados Unidos, Italia, Omán, Panamá, Portugal y Reino Unido. Entre todos ellos su plantilla llega a los 2.000 profesionales.
