La inversión de Nike en Amazon ha llegado a su fin. Así lo ha confirmado la compañía deportiva estadounidense apenas dos años después de iniciar un proyecto que no ha dado los resultados esperados.
Objetivos no alcanzados con Amazon
Nike confió en Amazon en el mes de junio de 2017. La compañía había sido reticente a invertir su estrategia de venta online a través del gigante del comercio electrónico, pero finalmente aceptó un proyecto experimental.
A nivel global, se identificó como un triunfo de Amazon y presentó a la empresa como incontestable, por su avance en el sector a nivel mundial.
Sin embargo, Nike tenía unos objetivos muy claros y no se han cumplido. Uno de los principales era terminar con las crecientes falsificaciones de sus zapatillas. Un mercado que a día de hoy sigue siendo constante y muy rentable para los artífices de la comercialización de estos diseños no oficiales.
En el comunicado oficial, no obstante, no se habla directamente de falsificaciones, sino de experiencia con el cliente.
Nike quiere así volcar toda su inversión en su propia tienda online, para ofrecer, según dicen, una relación con los consumidores que sea más directa, al mismo tiempo que más cercana o personal.
Obviamente esto no lo pueden conseguir a través de intermediarios como Amazon y otras plataformas similares. Sin embargo ahora queda por demostrar si realmente van a operar de esta manera.
Nike no necesita a Amazon
Lo cierto es que Nike como empresa no necesita invertir en Amazon. La compañía ha crecido según los ingresos del último trimestre, un 7% a nivel interanual.
La cifra de este crecimiento se representa en 10.200 millones de dólares, cantidad suficiente como para demostrar que la empresa es sostenible y sigue bien posicionada en el sector.