El Covid-19 ha representado uno de los obstáculos más importantes para la rentabilidad del deporte rey en España, como también en otros países.
Los clubes de fútbol se encuentran sin liquidez para asumir los salarios de los jugadores y han tenido que acogerse a préstamos y rondas de financiación urgentes, con la incógnita de si contarán con público durante 2021 todavía por resolverse.
Inversiones alternativas de los clubes de fútbol
Con esta situación, los clubes de fútbol buscan opciones de inversión. En primer lugar, aprovechando al máximo las clásicas vías, que son la venta de entradas, la retransmisión de partidos y el merchandising.
Con estos 3 valores en descenso o, como mínimo, en estado aletargado, hay que optar por alternativas.
La primera y más directa es la venta de jugadores que, sin embargo, se encuentra con un mercado estancado y de baja rentabilidad, precisamente por la situación actual.
Aprovechar fondos de deuda parece la salida más probable, de hecho muchos de ellos ya están negociando con los clubes españoles para afrontar una temporada aún incierta en términos de rentabilidad.
La inversión privada también es una alternativa interesante, sobre todo para proyectos a largo plazo en los que obtener una rentabilidad alta, teniendo en cuenta todo el potencial que este deporte sigue teniendo latente, para cuando se normalice la situación.
Las inversiones en este sentido, se enfocan principalmente en los derechos televisivos, que es el ingreso que menos se ha visto afectado por la crisis deportiva. Una vez retomados los partidos, el interés de los aficionados se acreciente, sin la posibilidad de asistir al campo de fútbol donde ver a sus equipos.
Algunas negociaciones actuales, como en Italia, alcanzan hasta un 10% de los ingresos por derechos de emisión a cambio de una inversión que puede llegar a salvar la temporada para los equipos.
