En España cualquier ciudadano conoce las dos tiendas más famosas de Inditex, Zara y Bershka y, quien más quien menos, ha invertido parte de sus ahorros por pocos que fueran en alguna de las prendas que tienen estas tiendas a la venta.
En Estados Unidos no sucede igual. Efectivamente Zara es también conocida por cualquier ciudadano de la primera potencia mundial, pero no sucede lo mismo con Bershka o, al menos, no pasaba hasta ahora.
Inditex ha anunciado su próxima inversión a partir de la marca Bershka en Estados Unidos en una estrategia muy diferente a la que tiene implantada en España o en otros países europeos.
Una tienda online y otra efímera
Para empezar abre la comercialización a una tienda online, en la que todos los usuarios de Estados Unidos podrán adquirir productos de Bershka de forma digital. Es una maniobra completamente normal que le está reportando actualmente ingresos desde 30 de los 75 países en los que opera, de forma exclusiva, sin contar con tienda física.
En Nueva York, concretamente en el Soho, sin embargo, sí que abrirá una tienda de Bershka, pero de nuevo será en base a una estrategia rompedora, la de una tienda efímera. Mediante una presentación de colecciones limitadas, los clientes estadounidenses, principalmente millenials en busca de diseños juveniles, divertidos y cálidos, podrán adquirir estos productos antes de que la cierre, sin saber cuándo volverá a abrirse en territorio estadounidense.
Si bien la primera estrategia permitirá a Bershka mantener unos ingresos constantes, la inversión en la segunda estrategia es un intento de branding agresivo, con el que Inditex quiere mostrar una mejor imagen de su marca, más ligada a un diseño atractivo y económico que, simplemente, a la consideración actual que tienen muchos clientes de ella como marca menor o baratsa con respecto a Zara.