Tras casi 3 años de abruptas caídas y tímidas recuperaciones, apoyadas sobre frágiles acuerdos entre los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), al final el sector parece ver atisbos de estabilidad para las próximas semanas y un propicio año 2018.
El incremento de los precios, que recupera niveles que no se tenían desde 2015, es una de las principales demostraciones en las que se basa este argumento de estabilidad. De esta forma, el barril Brent ha incrementado su precio un 2,8% este mismo lunes hasta llegar a los 58,4 dólares, mientras el barril West Texas mantenía un crecimiento por su parte del 2% y un precio final de 51,7 dólares la unidad.
Las 3 principales razones de la estabilidad del petróleo
Encontramos a nivel macroeconómico hasta 3 razones principales por las que es lógico que el petróleo adquiera estabilidad.
- Ley de la oferta y la demanda: Al contrario de lo sucedido en otros meses, en la actualidad la oferta y la demanda han encontrado el equilibrio perfecto de un precio asequible con suficiente rentabilidad para los países exportadores.
- Acuerdo de la OPEP: Pese a algunos síntomas de ruptura, al final el acuerdo de limitar la producción de barriles entre miembros de la OPEP ha dado sus frutos con un incremento global del precio del 15%. Los países han acordado que el acuerdo se mantendrá hasta marzo de 2018, pero de momento no se plantean su continuidad más allá de esta fecha.
- Bloqueo al Kurdistán: En pleno momento de referéndum por la independencia del Kurdistán iraquí, Irak ha solicitado la ayuda de países colindantes. El primero en prestarla ha sido Turquía con la amenaza de bloqueo en la exportación petrolera, que recortaría en medio millón de barriles al día la producción. Esto, como consecuencia, requeriría un incremento del precio del barril al haber menos cantidad en el mercado internacional.